Cuando te siguen los fantasmas...

En una casa de Ituzaingó, La familia decidió mudarse al sufrir fenómenos extraños, pero en su nueva vivienda reaparecieron las señales.

No siempre las investigaciones salen como se preveían, ni tampoco los resultados son los que esperaban los actores de un trabajo en curso. Claro que, cuando de fenómenos paranormales se trata, a veces hay que efectuar una minuciosa y determinada operación, que lleva días analizar, para obtener conclusiones valederas, confiables. Este es el mejor ejemplo de que, con la verdad, se alcanza un grado de seriedad que realza una investigación. Porque, más allá de cualquier especulación, el resultado es inapelable.

¿Por qué esta introducción? Sucede que el equipo de Fenómenos Paranormales fue requerido una vez más con una premisa clave: investigar una casa de Ituzaingó cuya dueña se contactó tiempo atrás, muy preocupada, ya que está viviendo sensaciones difíciles de explicar, cercanas a lo paranormal. Para entender mejor la cuestión hay que explicar primero que la familia había vivido antes en una propiedad donde, aparentemente, había muchísima actividad paranormal. Cansados de vivir estas situaciones, decidieron mudarse a solo veinte cuadras de aquella primera misteriosa vivienda. Apenas si se llevaron algunos muebles y unos pocos cuadros y enseres a la nueva y confortable casa. Pero a pesar del cambio de ambiente y luego de un período de supuesta tranquilidad, desde hace un tiempo en el nuevo domicilio aparecieron situaciones inexplicables: ruidos extraños, canillas que se abren solas, sombras que parecen moverse en la oscuridad y reacciones de los más pequeños de la casa, que generaron inquietud y hasta temor...

Antecedentes a considerar

La familia en cuestión ya había vivido tiempo atrás, en el primero de las domicilios citados, extrañas experiencias. Por ejemplo, en una ocasión amigas adolescentes de la hija se quedaron a dormir y vieron cómo a los pies de la cama de la habitación de enfrente, donde descansaba la joven dueña de casa, una niña jugaba sola y se movía como si nadie la observara. Las invitadas, sorprendidas y asustadas, contaron luego que cerraron los ojos pensando que no podía ser real lo que estaban viendo, pero la niña siguió ahí unos cuantos minutos hasta desvanecerse...

Otra vez, las luces del baño del piso superior –aquella vivienda tenía planta alta– se prendieron solas, cuando los moradores estaban seguros de haberlas apagado. Además varias veces sintieron pasos en la escalera y en aquellos cuartos. Inquietos, decidieron investigar si había sucedido algo especial en aquella casa. Pudieron averiguar que, aparentemente, había sido utilizada como clínica clandestina para realizar abortos. Enterados de esto y hartos de los hechos vividos, decidieron mudarse.

Diferente casa, problemas parecidos

Durante poco más de un año todo estuvo tranquilo en la nueva casa. Sin embargo al poco tiempo, y coincidentemente con el fallecimiento de un familiar cercano, la actividad se reactivó. La multiplicación de los hechos daba a entender que, poco a poco, aquellos viejos miedos del pasado retornaban. De otra forma y en otro contexto, pero como si fuera un segundo capítulo de la misma historia. Fue entonces cuando el hermano de la dueña de casa se contactó, a través de Facebook, con los principales referentes de Fenómenos Paranormales –Ariel López y Federico Orbes–, a quienes explicó que, si bien él no había vivido ninguna experiencia, la que sí vive situaciones extrañas es su hermana. Se armó el encuentro y, una vez analizado todo el material previo, el pasado sábado 13 de abril se decidió efectuar la investigación.

Una noche a pura investigación

Arrancó después de las 23.00, una vez repasadas todas las vivencias que los habitantes de la vivienda padecieron en los últimos meses. Así, se armaron dos grupos de trabajo que iniciaron la tarea de campo, que desde el mismo comienzo generó ciertas dudas y algunas respuestas en los equipos, lo que hacía pensar que tal vez se pudiera llegar a encontrar algo de actividad paranormal. Sin embargo las pruebas no mostraban un sustento firme, sino que se iban disolviendo con el correr de las horas, en especial porque esas pequeñas interacciones que se recibían en los medidores de campos electromagnéticos (EMF) no parecían tener respuesta inteligente, sino eran más bien erráticas e incomprensibles.

Igual se continuó adelante

Pese a las dudas surgidas desde un principio, se efectuaron varias pasadas por los diferentes ambientes. Así, mientras Leila Rick y Jorge Fernández Gentile cubrían la parte posterior de la casa, en el living Ariel López y Liam Bianco, junto al resto de la familia, hacían lo suyo. Fotos, grabaciones de audio, medidores de temperatura e intentos a través de diferentes métodos de interacción con varios dispositivos no arrojaron más que vestigios de actividad residual.

Tras una pausa para calmar y despejar el ambiente, se invirtieron las posiciones de los equipos y, si bien hubo momentos en los que los medidores de EMF (K2) arrojaron cierta actividad, la mayoría fue algo débil como para poder dar una respuesta razonable. Cerca de las cinco de la madrugada del domingo, tras una charla con los integrantes de la familia presentes –café de por medio– y con muchísima información recolectada a través de muchos dispositivos, concluyó la investigación.

Siempre se llega a una conclusión

Tarea para el hogar, en especial para Ariel López quien, luego de efectuar un análisis exhaustivo de todo el material obtenido en Ituzaingó, pudo contabilizar que las impresiones erráticas evaluadas no solo no habían sucedido en los dos equipos, sino que muchas de las historias que se habían escuchado tenían explicaciones fundamentadas que no arrojaron más claridad a lo que sucede en la casa. Es cierto, si bien se pueden descartar muchas cuestiones, sí se puede ver en la evidencia que durante toda la noche hubo cierta actividad errática y no inteligente en el lugar. Sensaciones extrañas y de cierta actividad daban a entender que algo podía estar sucediendo... A partir de esto, se centró la atención en aspectos relacionados a la vivienda anterior y se pudo deducir que, si bien hay un grado de sugestión en la familia, dicha sugestión se debe al hecho de que han realmente convivido en la otra casa con fenómenos paranormales y, en la actualidad, parte de esa actividad se ha “mudado” con ellos.

Explicación probable

De acuerdo a las teorías de la investigación paranormal, hay un fenómeno que se llama actividad o energía residual. Esto significa que, si bien las presencias no son inteligentes ni están físicamente en el lugar, algunos efectos personales o que han tenido que ver con ciertos seres aún se materializan de alguna manera para crear esta actividad. O para explicarlo de forma más sencilla: algunos cuadros y muebles que hoy están en la casa siguen “cargados” de aquella energía y por lo tanto se manifiestan... En ese sentido, se debe recordar que aún existe en el lugar algo de esa energía paranormal impregnada en objetos que proceden de la vivienda anterior, que cargan energía en determinados momentos y por distintas circunstancias llegan a percibirse. Por ejemplo, sillones con telas de labrados antiguos de Perú, confeccionados con un tipo de madera que, en forma natural, tienden a mantener en su nivel vibracional estos tipos de energía. O los grabados en cuero, que tienen simbología milenaria y relacionada con lo religioso, creencias y espiritualidades de antiguas comunidades que mantienen esa carga. De todas maneras, y para bien de los habitantes del lugar, dicha energía residual no es maliciosa. Simplemente habría que hacer una limpieza energética para que estos fenómenos dejasen de suceder. Pero esa será otra historia...